PRUEBAS DE LA EVOLUCIÓN
3.1 PRUEBAS ANATÓMICAS Y MORFOLÓGICAS
ÓRGANOS HOMÓLOGOS:
Son órganos que tiene el mismo origen evolutivo y comparten idéntico patrón estructural. Constituyen una prueba de la evolución divergente, que consiste en la aparición de diversos cambios, de acuerdo con las diferentes formas de vida, a partir de un grupo antecesor.
ÓRGANOS ANÁLOGOS:
Son órganos que realizan la misma función. Constituyen una prueba de la evolución convergente, que consiste en cambios que han dado lugar a estructuras semejantes, a partir de distintos organismos antecesores.
Para entender mejor las diferencias y similitudes entre los órganos homólogos y análogos os dejo el enlace de un vídeo:
ÓRGANOS VESTIGIALES:
Constituyen una prueba de la evolución a partir de antepasados. Un ejemplo de órganos vestigiales son las alas de los kiwis y los casuarios.
3.2 PRUEBAS PALEONTOLÓGICAS
Los fósiles revelan que existieron organismos diferentes. En ocasiones se han encontrado fósiles donde se pueden ver claramente transformaciones lentas y progresivas. Se trata de las llamadas series evolutivas.
Algunos organismos no han cambiado desde hace mucho tiempo, son los llamados fósiles vivientes.
Ejemplos: El celacanto y el nautilus
3.3 PRUEBAS EMBRIOLÓGICAS
En 1866, Haeckel anunció la ley biogénetica fundamental. Cuando los embriones de diferentes especies son similares, existe un parentesco evolutivo entre ellas. Cuanto más próximo sea el parentesco entre dos especies; mayores serán las similitudes entre los embriones.
3.4 PRUEBAS BIOGEOGRÁFICAS
Con el tiempo, los grupos de organismos aislados geográficamente evolucionan de forma distinta y originan nuevas especies, pero mantienen características similares que revelan un antepasado común.
3.5 PRUEBAS MOLECULARES
El estudio de las moléculas que se encuentran en los seres vivos revela que cuanto mayor es el parecido molecular entre dos grupos de organismos.
- A mayor grado de parentesco, mayor similitud en los componentes moleculares.
En el caso de la clorofila, presente en todas las plantas verdes, o la hemoglobina, presente en la sangre de los vertebrados; son un claro ejemplo de que existen un mismo origen evolutivo.
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